Collarín cervical ¿Qué es y en qué situaciones es recomendable utilizarlo?
El collarín cervical, conocido también como cuello ortopédico, es una órtesis que se coloca en el cuello con el objetivo de estabilizar e inmovilizar el segmento vertebral cervical.
Además sirve para inmovilizar la columna a nivel cervical, con el fin de evitar lesiones a nivel de la médula espinal, tanto en la recogida como en el transporte y en la realización una radiografía.
También se utiliza para el tratamiento de dolor de cuello como un esguince, artrosis o latigazo cervical.
¿En qué situaciones es recomendable utilizarlo?
Lesiones traumáticas de cabeza o cuello: un collarín cervical generalmente se utiliza después de una lesión grave en el cuello o la cabeza. Ayuda a estabilizar el área cervical de la persona lesionada, como el cráneo y la médula espinal, lo que evita más lesiones.
Recuperación: se recomienda el uso del collarín como aparato ortopédico para el cuello durante la recuperación de lesiones traumáticas de cuello o cabeza y después de una cirugía de columna vertebral. También inmoviliza las áreas lesionadas y libera el estrés de esa parte del cuerpo.
Latigazos: con frecuencia, los collarines cervicales se utilizan para tratar afecciones médicas del cuello y la columna vertebral que pueden incluir latigazos cervicales, alineación de la médula espinal y esguinces.
El latigazo cervical se produce cuando los tejidos espinales están gravemente dañados. Se trata comúnmente con un collarín blando.
Dolor de cuello: todos los dolores de cuello son consecuencia de lesiones cervicales repetitivas o tensiones crónicas. Los collares cervicales se usan para controlar el dolor bajo la supervisión de un médico capacitado.